La pérdida auditiva es la disminución parcial o total de la capacidad para escuchar sonidos. Puede afectar a uno o ambos oídos y presentarse de forma leve, moderada, severa o profunda. Esta condición puede desarrollarse de manera gradual o repentina, y afecta tanto a niños como adultos, impactando la comunicación, el aprendizaje y la calidad de vida.
Las personas con pérdida auditiva suelen tener dificultades para seguir conversaciones, especialmente en ambientes ruidosos. Pueden aumentar el volumen del televisor, pedir que les repitan lo que se dice, o incluso aislarse socialmente. También pueden experimentar zumbidos o pitidos (tinnitus) como síntoma asociado.
Las causas pueden ser múltiples, entre ellas:
Identificar la causa es fundamental para definir el tratamiento adecuado.
En nuestra consulta realizamos una evaluación auditiva completa mediante audiometría clínica, lo que nos permite determinar el tipo y grado de pérdida auditiva. Según el diagnóstico, ofrecemos:
Nuestro enfoque está centrado en mejorar la calidad de vida a través de una audición funcional y efectiva.
La pérdida auditiva no solo afecta la comunicación, también puede generar aislamiento, frustración y pérdida de confianza. Un diagnóstico temprano puede marcar la diferencia entre escuchar o no a tus seres queridos.
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